MAS RETROCESOS: EL GOBIERNO RESTRINGE FUERTEMENTE EL ACCESO AL CANNABIS MEDICINAL
La Resolución 3132/2024 de la cartera que conduce el Ministro Mario Russo reemplazó varios artículos de la norma que regía desde 2021 y regulaba el uso medicinal del cannabis. No se preocupan por destrabar el gran cuello de botella existente en la aprobación del REPROCAN, sino que, por el contrario: modificaciones que son un retroceso y, en algunos casos, una sucesión de incongruencias.
A partir de ahora es requisito excluyente para solicitar la inscripción en el REPROCANN contar con indicación médica para uso de cannabis y sus derivados por parte de un profesional médico que se encuentre registrado en la Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud (REFEPS) y contar con una Diplomatura o Maestría sobre el uso medicinal de la Planta del Cannabis Medicinal. Básicamente se le veda por completo la autorización para vincular pacientes a casi la totalidad de los profesionales médicos, ya que de la resolución no surge cuáles son las diplomaturas u establecimientos educativos que el Ministerio de Salud tomará como válidos. Acaso hay médicos que realicen distintas diplomaturas más allá de su carrera para recetar cada uno de los medicamentos que creen conveniente recetar? No puede exigirse como un requisito excluyente porque no constituye una especialidad en sí misma. La terapéutica cannábica es transversal a la formación de los profesionales, es un recurso más para abordar problemas de salud
Y hay que ser muy claros en esto: Sin médicos que vinculen pacientes, no hay REPROCANN
También desde esta resolución, la figura del cultivador solidario únicamente podrá cultivar para dos pacientes. Y si uno es el mismo cultivador solidario que tiene su cultivo, esta norma se vuelve aún más restrictiva, llevando sólo a la posibilidad cultivar solidariamente para un paciente. Cuál es el problema de cultivar para un número mayor si los datos de los pacientes se encuentran debidamente denunciados ante el Ministerio y poseen una prescripción médica?
Otra de los retrocesos de esta nueva normativa es la instalación de una mirada que busca estigmatizar a todos aquellos que tuvieron previamente una causa vinculada al “uso de estupefacientes o sustancias prohibidas o el uso indebido del cannabis medicinal”. Esta aclaración es fundamental ya que no está refiriéndose a delitos vinculados a la comercialización (es decir, lo estipulado como narcotráfico), sino al uso “del cannabis medicinal”. Una comunidad que fue construyendo el estado actual de la norma naciendo desde la clandestinidad en el uso medicinal hasta conquistar derechos que, estimábamos, ya eran adquiridos
Todos los avances logrados por pacientes, familiares y comunidad científica en largos años de debate, investigaciones y acuerdos, son destrozados por una gestión que en pocos meses dejó en claro que no le importa demasiado la gente
El gobierno de Milei vuelve a demostrar que el verso del liberalismo solo esconde a una gestión ultraconservadora.
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